* Chiapas se ubicó entre las tres entidades federativas con las tasas más altas de ocupación; sin embargo, con el 48.5%, también lidera la lista de peores condiciones de trabajo.
Daniela Alfaro
Según los datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), en el último trimestre de 2023, la situación laboral en Tuxtla Gutiérrez se volvió desafiante, evidenciando que el 41.2 por ciento de la población tuxtleca enfrenta malas condiciones de empleo. Este fenómeno incluye a aquellos que trabajan más de 35 horas semanales con ingresos por debajo del salario mínimo.
En este sentido, la ciudad capital se ubicó en el segundo lugar a nivel nacional en condiciones críticas laborales. Estos datos, proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), detallan la situación de ingresos y horas trabajadas en la ciudad. El primer puesto en este ranking lo tiene Reynosa con un 44 por ciento, seguido por Tuxtla Gutiérrez, mientras que Tapachula ocupa el tercer lugar con un 40.2 por ciento.
Los datos de dicha encuesta señalan un incremento del tres por ciento de condiciones precarias de empleo en el último trimestre del año pasado. Este aumento, junto con una tasa de informalidad de 50 puntos, pone de manifiesto la vulnerabilidad laboral en una proporción significativa de la población activa en Tuxtla Gutiérrez.
A pesar de la disminución del 1.6 por ciento en la tasa de desempleo en comparación con el mismo periodo de 2022, la mayoría de la población activa no experimenta mejoras sustanciales en sus condiciones salariales. El aumento en la población que percibe apenas un salario mínimo plantea interrogantes sobre la distribución de ingresos y la calidad del empleo en la ciudad.
Cuantitativamente, Tuxtla Gutiérrez concluyó el cuarto trimestre de 2023 con 10 mil 628 personas desempleadas, lo cual evidencia una disminución respecto a 2022. No obstante, el hecho de que el 42 por ciento de los tuxtlecos trabajen en la inestabilidad resalta la urgencia de implementar políticas laborales más equitativas.
En cuanto a las tasas de desempleo, Chiapas se destacó con una cifra baja, situándose junto a Oaxaca (1.5 por ciento) y Campeche (1.7 por ciento) como las entidades con las tasas más bajas del país, registrando un 1.7 por ciento. Esta tendencia refleja un panorama laboral relativamente estable en Chiapas en comparación con otras entidades federativas.
Sin embargo, el estado también reflejó un elevado índice de precariedad laboral, situándose en el primer lugar a nivel nacional con el 48.5 por ciento, así como elevadas tasas de informalidad, ubicando a la entidad en segundo lugar con el 73.2 por ciento. Cabe destacar que la tasa de informalidad laboral hace referencia a las personas mayores de 15 años ocupadas que son laboralmente vulnerables por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan.
La informalidad laboral presenta un desafío significativo en el contexto socioeconómico del estado, considerado que es el más pobre de México. La informalidad no solo afecta la estabilidad de empleos y la poca seguridad social de los trabajadores, sino que también contribuye a la fragilidad económica general por la falta de acceso a beneficios y prestaciones.
FUENTE: https://www.inegi.org.mx/app/saladeprensa/noticia.html?id=8879