Daniela Alfaro
La FGR insiste en la existencia de un segundo tirador en el asesinato de Luis Donaldo Colosio, y apunta al encubrimiento de Genaro García Luna. Aunque un juez rechazó ordenar la aprehensión del agente del CISEN, Jorge Antonio Sánchez, la FGR anunció su apelación.
La Fiscalía General de la República (FGR) reafirmó la presencia de un segundo tirador en el asesinato del candidato presidencial Luis Donaldo Colosio el 23 de marzo de 1994 en Tijuana, Baja California. A pesar de la negativa del juez Quinto de Distrito de Procesos Penales Federales de girar una orden de aprehensión contra el agente del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), Jorge Antonio Sánchez, la FGR anuncia su intención de apelar la decisión.
Según la FGR, el juez actuó con evidente parcialidad y quebrantó principios obligatorios en la valoración de pruebas. Señalan que el agente Sánchez, asignado a cubrir a Colosio, estuvo involucrado en un encubrimiento delictivo, vinculado directamente con Genaro García Luna, entonces Subdirector Operativo en el CISEN, quien lo rescató en Tijuana.
Las pruebas presentadas indican la presencia del agente en el lugar del homicidio en el mismo momento del crimen, con una diferencia de segundos entre ambos disparos. La FGR destaca análisis de sangre que encontraron el tipo de sangre de la víctima en la ropa del acusado, así como pruebas de rodizonato que sugieren su participación en el disparo. Testimonios también señalan al acusado en el lugar de los hechos, huyendo después de los disparos, y contradicen la afirmación de que ayudó a transportar a Colosio herido.
La FGR sostiene que el CISEN envió al acusado al lugar de los hechos para luego encubrirlo y sacarlo de Tijuana de manera urgente y subrepticia. Además, critican la valoración del video testimonio del primer disparo por parte del juez, alegando que estaba dirigido hacia el primer tirador (Mario Aburto Martínez) y no hacia el segundo, dificultando su observación.
A pesar de los obstáculos judiciales, la FGR anuncia su intención de interponer un recurso de apelación, confiando en que el Poder Judicial Federal actuará con estricto apego a derecho, considerando la gravedad del delito cometido contra la vida del candidato presidencial Luis Donaldo Colosio.