Sr. López Callada mi madre (cosa rara) y callados todos en el coche, sudando como pollos en rosticero; al volante mi progenitor, hable y hable (cosa rarísima), manejando su Chevrolet 59 rumbo al lugar que lo vio nacer, anticipándonos la trasparencia del aire, la inmensidad del horizonte y los especiales colores que ahí adquiría todo, […]