Home Columnas Otra vez la caravana / A Estribor

Otra vez la caravana / A Estribor

Otra vez la caravana / A Estribor
0
0
Juan Carlos Cal y Mayor
De nueva cuenta arrancó una caravana con unos 15 mil migrantes provenientes de Honduras, y a los que se sumaron salvadoreños a su paso por ese país. Donald Trump se fortalece en su postura para presionar a la mayoría demócrata para el financiamiento del muro.
Una mayoría de votantes norteamericanos respaldan sin transigir, una política migratoria que se niega a la pretensión de cientos de miles de migrantes, mayoritariamente centroamericanos, a seguir entrando de manera ilegal a los Estados Unidos.
Con muro o sin muro, Trump ha utilizado incluso a la guardia nacional y no ha permitido entrar a las caravanas anteriores que hoy se ven en la percepción de la opinión pública norteamericana como una amenaza a la seguridad nacional. Durante tres décadas millones de migrantes han entrado de manera ilegal porque, paralelamente a la lucha igualitaria de la comunidad afroamericana, éstos suplieron la demanda de mano de obra que la economía norteamericana requería en empleos como los jornaleros, los domésticos y de servidumbre.
NO PASARÁN
La aquiescencia con que los hijos de migrantes indocumentados adquirieron legalmente la nacionalidad estadounidense, hoy se manifiesta en un importante crecimiento de la comunidad latina, la cual conserva sus vínculos culturales, religiosos e idiosincráticos.  Ante los ojos de la aún mayoría (69%) caucásica protestante o de otros orígenes incluidos los latinos mimetizados al credo americano; esto representa una amenaza a los valores fundacionales. Más si consideramos que la curva de crecimiento poblacional advierte un incremento significativo de la población latina sobre la afroamericana y, eventualmente para el año 2050, a la población blanca.
Un eventual triunfo de los demócratas tampoco garantiza frenar esta determinación que se ha reflejado en la continua deportación de millones de indocumentados en los últimos años y que se fortaleció desde el gobierno de Barack Obama.
LA NUEVA POLÍTICA MIGRATORIA DE MÉXICO
López Obrador ha impulsado una serie de acciones con el ánimo de mejorar las relaciones con el gobierno de Donald Trump. Aunque no se ha materializado un encuentro formal entre los presidentes de México y EU, es claro que nuestro país ha emprendido acciones para frenar la migración a los Estados Unidos tal y como lo ofreció AMLO en campaña.
Está decidido a generar oportunidades de empleo para los mexicanos y que éstos no se vean en la necesidad de migrar y aventurarse a todos los riesgos y penurias que pasan nuestros connacionales. De hecho en los últimos años ha disminuido significativamente ese fenómeno.
ACCIONES CONCRETAS
Por lo pronto ya se aprobó el régimen fiscal en la zona fronteriza que pretende estimular la economía y anclar los empleos en México. Entretanto, es evidente que México ha decidido abrir su frontera sur a los migrantes otorgando visas de trabajo en una suerte de exilio laboral. Si no logran internarse a los Estados Unidos, lo cual es absolutamente probable, están dispuestos a quedarse y buscar trabajo en México.
PREGUNTAS
¿Está México preparado para integrar a su economía a los migrantes centroamericanos?, ¿cuántos miles, o decenas de miles, están dispuestos ha recibir?, ¿afectará la oferta de empleo para los propios mexicanos? No lo sabemos con seguridad. Fox afirmaba, racista y despectivamente, que los mexicanos hacían trabajos que ni los negros quieren hacer en los EU, ¿harán eso los centroamericanos en México? Muy probablemente sí. Sobretodo ahora que los programas asistenciales han estimulado la pereza y el conformismo. Prueba de ello es que desde hace décadas, los guatemaltecos hacen la pisca del café que los mexicanos no quieren hacer.

LEAVE YOUR COMMENT

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *