México será uno de los 6 países más afectados económicamente por el Covid-19, alertó la OCDE
Angie Jiménez
Las medidas aplicadas de encierro completo por la pandemia de Covid-19 puede suponer para la economía de México un descenso posible de la actividad del 29%, según las valoraciones de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), que los considera como uno de los países más afectados debido a su estructura productiva.
En un informe publicado este viernes 27 de marzo, la OCDE calificó el impacto del encierro completo para cada unos de sus integrantes y algunos otros grandes países emergentes, con notables variaciones entre ellos.
Uno de los países que podría salir más perjudicado podría ser Grecia, con una caída del 34% de la producción tras la aplicación de esas medidas, seguido de Japón (30%) y luego México, Alemania, España y Suecia (29%).
El gobierno de México, constituido por el presidente Andrés Manuel López Obradorn México, apenas dió inició esta semana con el protocolo de la Fase 2 de su programa de contingencia. Según cifras oficiales dadas a conocer el jueves 26 de marzo, el país registra 585 pacientes confirmados. La cifra de decesos se elevó a ocho.
Además, existen 2,156 casos sospechosos y 2,965 casos negativos. Del total de casos confirmados, 58% son hombres y 42% son mujeres. El 90% de estos pacientes son ambulatorios y el 10% se encuentran hospitalizados.
De los casos positivos de Covid-19 que han recibido atención médica, 86% fue de forma ambulatoria o en sus domicilios, el 6% de hospitalizados se encuentran condiciones estables, y el 3% en una condición grave.
Otros grandes países desarrollados que también se verán fectados con caídas de gran envergadura son Reino Unido (26%), Italia (26%), Francia, (25%) o Estados Unidos (25%).
El impacto es algo menor para algunos de los emergentes, como Argentina (20%), Brasil (20%), India (20%) y China (19%).
El motivo de esas diferencias consiste, en primer lugar, en el peso que tienen para cada país unos y otros sectores, sabiendo por ejemplo que el confinamiento puede hundir hasta en un 70% la actividad turística.
La OCDE no anticipa las implicaciones para el desarrollo económico en un trimestre o en lo que queda del año, porque eso dependerá del tiempo que dure el encierro en las casas, negocios, de los efectos sobre productores, proveedores, de las medidas fiscales y monetarias que se pongan en marcha.
Pero sí ha analizado que un mes de confinamiento reduce el Producto Interno Bruto (PIB) anual en 2% y que si la situación se llegara a prolongar más de tres meses, el retroceso se situaría entre 4% y 6 %.
La OCDE detalló que las medidas de confinamiento por la pandemia de COVID-19 sufieren una disminución de la actividad de hasta un tercio en las grandes economías del mundo, y ha calculado que si en cada mes se mantiene esta situación restará 2% del producto interior bruto (PIB) en 2020.
La OCDE alertó que muchas economías caerán en recesión, es algo “inevitable” porque hay que hacerle frente a la pandemia y al mismo tiempo hacer lo necesario para que la actividad económica y laboral arranquen tan pronto como sea posible.
Estas evaluaciones las presentó José Ángel Gurría, secretario general de la OCDE, a los líderes del Grupo de los 20 (G20) en su cumbre virtual del jueves 26 de marzo, donde instó en que hacen falta más acciones para amortiguar el choque económico y una respuesta más coordinada de los diversos gobiernos para salvaguardar a las personas y a las empresas, que saldrán muy afectadas de la crisis.
La OCDE, que habla de estimaciones más que de proyecciones dada la incertidumbre sobre la duración y efectos del confinamiento, sugiere que el impacto es diferente para cada nación en función del peso relativo que tiene cada sector en su economía y de otras detalles propios.
La organización informa que países donde el turismo tiene un peso económico importante, dado que ese sector podría sufrir desplomes de hasta el 70 %, se varán más dañados.
En contrate, los que tienen una actividad muy girada en la agricultura, en la minería y el petróleo deberían verse menos afectados en un primer momento, aunque luego sufrirían el choque de la disminución de la demanda mundial de materias primas.
“El alto costo de las medidas sanitarias que se imponen ahora son necesarias para impedir consecuencias mucho más trágicas y un impacto todavía peor en nuestras economías mañana”, agregó Ángel Gurría.
La razón de esto se debe a la posibilidad de que haya “millones de muertos” y un colapso de los sistemas sanitarios “nos perjudicaría financieramente y como sociedad”. Por eso, afirma que “ralentizar esta epidemia y salvar vidas humanas tiene que ser la prioridad de los gobiernos”.
El mexicano ya hizo un comunicado el pasado fin de semana para poner en ejecución “un plan Marshall global”, en referecnai al programa masivo de ayuda que puso en marcha Estados Unidos al final de la Segunda Guerra Mundial para ayudar a sus aliados a recuperarse económicamente.
