Sr. López
Tía Victoria, ya saben quién, la de Toluca, la lengua más temida de la familia y la entidad, fue siempre soltera, lo que no fue obstáculo para que acumulara más colchones que la cadena Hilton International. Bueno, pues un buen día, ya de 72 años de edad, retumbó por toda la ciudad ¡que se casaba!, y se casó, efectivamente, se casó con un señor de muchos más de 80, agricultor de Sinaloa, exageradamente cargado de dinero que se perdió de amor por ella. Nada más que la tía no tenía la menor intención de aguantar al viejito enamoradizo y lo convenció de que era virgen (¡ella!), y en razón de eso, considerando su edad, él debía ser un caballero y concederle dormir en recámaras separadas. Y así fue… y el viejito decía que tenían un ‘matrimonio blanco’. De que los hay, los hay.
El ya casi gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo (¡por favor!, ya saquen a asolear a ese pobre hombre… echa cardillo de pálido), ayer en entrevista con ‘El Universal’, dijo muy orondo que la elección en esa entidad ‘(…) muestra al PRI fuerte para el 2018’… a ver, le repito: según Alfredito III, su elección prueba la fortaleza del partido tricolor para las elecciones presidenciales del próximo año. ¡Caramba!
Manifestó don del Mazo que los votos que obtuvo ‘son un gran resultado, más del 33%, 33.7% (…)’. Bueno, este señor aparte de sol, necesita Fosfovitacal: su partido junto con sus aliados sí sacó esa votación, pero (¡lástima Margarito!), los que votaron PRI son solo el 29.82%… y por eso es que está que revienta de orgullo y por eso es que considera que su elección muestra lo fuerte que llega el PRI al 2018. ‘Tá bueno.
Dejando sin comentarios las elecciones del pricámbrico clásico (López Portillo ganó con el 91.9% de la votación… sin competidores), dado que todos sabemos cómo se contaban los votos en esa era, repasemos la tendencia electoral de tiempos de Miguel de la Madrid para acá:
En 1982, don Miguelito sacó el triunfo con el 68.43 %; en 1988, Salinas de Gortari, obtuvo el 50.36 % aunque parece, dicen, se rumora, que con trampa… ¡qué cosas inventa la gente!, lástima que De la Madrid se lo haya confesado al ‘New York Times’, que ya ve usted que es un periodiquito de pueblo (‘Ex-President in Mexico Casts New Light on Rigged 1988 Election’, By Ginger Thompson; march 9, 2004; en traducción a marro: ‘Expresidente de México echa nueva luz sobre las elecciones fraudulentas de 1988’; y da detalles contenidos en la autobiografía de don Miguelito; aunque lo haya negado en entrevista posterior con Jacobo Zabludovsky, ahí está escrito en su librito). En fin.
Luego fue la elección de Ernesto Zedillo, 48.69 %… y de ganar con porcentajes del 70, 80 y hasta más del 90%, fueron bajando y en el año 2000 se les apareció Vicente Fox, al que le bastó el 42.52 %, para sacarle 6.41% de ventaja al PRI de Labastida, que se quedó con el 36.11% (y no le fue tan mal, digo, para la clase de candidatito que fue). Volvieron a perder la presidencia contra Calderón, pero esa vez, quedaron con el 22.26% de votos, en tercer lugar (¡Madrazo!, lleva mayúscula porque es apellido, no piense usted mal).
Pero, ¡no hay imposibles! y regresaron al poder los tricolores en 2012, de mano de don Peña Nieto con el 38.21% de la votación (limpiecita, eso sí, por favor, no empiecen con enredos ni con chismes), nada más que el porcentaje de don Peña Nieto, es 10.48 puntos debajo de Zedillo… nada más. Y ahora, don del Mazo, muy ufano con su 29.82% (que sí, claro, con los votos agregados de los que se aliaron con él, llegó al 33.7%).
Si don Alfredito III considera que es una prueba de la fuerza de su partido ir baje y baje en las votaciones, ya es cosa suya, ni modo de ponerse a explicarle con manzanitas, pero sin recordarle que el 5 de junio de 2016 su partido fuertote, perdió siete de doce gobiernos estatales, tal vez entienda la verdadera fuerza con que llega el PRI a las elecciones presidenciales del 2018, si se entera que -según la Auditoría Superior de la Federación, ASF-, en 22 estados gobernados por compañeros suyos de partido, durante el sexenio de don Peña Nieto, hay más de 258 mil millones de pesos bailando (desvíos por 258 mil 829 millones 185 mil pesos de los recursos públicos, dice la ASF, a uno no le crean nada).
Y más fuerte (qué digo fuerte:¡ vitaminado y pasteurizado!), llega el PRI a la competencia, si se toman en cuenta algunos de sus cuadros distinguidos, todos exgobernadores, todos priístas: César Duarte Jáquez, de Chihuahua (buscado por Interpol); Javier Duarte, de Veracruz (preso en Guatemala); Andrés Granier, de Tabasco (preso en México); Tomás Yarrington, de Tamaulipas (preso en Italia); Roberto Borge, de Quintana Roo (preso en Panamá); Francisco Olvera, de Hidalgo (acusado por haber recibido 600 millones de pesos al otorgar 3 mil concesiones de taxis).
Faltan otras personalidades: Jorge Herrera Caldera, de Durango, amparado porque su sucesor, José Rosas Aispuro, dice que le dejo un batidero y una deuda inmensa (15 mil millones, ni aguanta nada); Miguel Alonso Reyes, de Zacatecas (denunciado ante la PGR por delincuencia organizada, enriquecimiento ilícito y desvío de fondos); Eugenio Hernández, de Tamaulipas (perseguido en EUA por narco y lavado de dinero); Rodrigo Medina, de Nuevo León (en libertad bajo fianza); Fausto Vallejo, de Michoacán (investigado por desvío de 2 mil 323 mdp, y por su probable relación con el narco); Carlos Lozano de la Torre, de Aguascalientes (investigado por desvío de 812 millones de pesos); Mario Anguiano, de Colima (investigado por el Órgano Superior de Auditoría y Fiscalización de su estado, por el desvío más de 2 mil 119 millones de pesos).
Hay más casos de exgobernadores bajo la lupa de la ley y de los que están ahora en el cargo… más todavía, sin andar metiéndose en honduras con casas de Higa, contratos de OHL, de Odebrecht, ni nada de eso que a nadie nos consta.
Tiene razón don Alfredito, van rebien ¿ por qué la duda?, son nuestra carta fuerte, nuestro Pancho Pantera.
