Tras la declaración del exdirector de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya, afirmando que legisladores del Partido Acción Nacional (PAN) fueron sobornados para aprobar reformas del Pacto por México, la dirigencia del PAN dijo que solo son dichos de un presunto criminal que podría acusar a los adversarios del gobierno federal, con tal de salvar su situación jurídica como indiciado.
Por ello, el partido político exigió a las autoridades que se conduzcan con legalidad, aporten las pruebas y hagan justicia de manera pronta y expedita para deslindar responsabilidades.
En un comunicado indicó que quien acusa está obligado a probar.
Consideró que los legisladores de Acción Nacional no tenían que ser convencidos de la reforma energética, ni de su legislación secundaria, ya que siempre “hemos estado a favor de abrir la inversión, modernizar y hacer más competitivo el sector energético, impulsando las energías limpias y renovables”.
Resaltó que no permitirán ninguna ilegalidad cometida ni se consentirá a ninguna persona, pero que al igual, tampoco se permitirá, como se ha hecho en el pasado, el uso de la justicia como instrumento de propaganda para dañar al partido y el buen prestigio de sus liderazgos.
Destacó que en todos los casos se debe respetar la presunción de inocencia y cuidar el debido proceso ya que en este tema no se está haciendo ni una ni otra.
Señaló su inclinación hacia “acabar con la corrupción del pasado, pero también la del presente, porque ya son muchos los hechos de presunta corrupción por parte de miembros del equipo cercano al presidente y en todos los casos el gobierno se ha hecho “de la vista gorda”.
Finalmente, insistió en que el gobierno pretende distraer a la opinión pública con el asunto de Lozoya y tender una cortina de humo ante el fracaso de sus políticas.
(Con información de La Jornada)
