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Código Nucú / En riesgo, Feria del Libro de la Unach

Código Nucú / En riesgo, Feria del Libro de la Unach
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César Trujillo

 

Desde su imposición el 3 de diciembre del 2014 como rector de la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach), Carlos Eugenio Ruiz Hernández parece haber llegado con la consigna de tronar los avances significativos que había conseguido el alma máter de muchos de nosotros. El trabajo de sus antecesores ha sido sepultado y, en muchos casos, ha quedado como letra muerta sobre los hombros de un político fatuo que bien podría ser administrador de cualquier hospital, pero que es inoperante en la administración de una casa de estudios.

Ruiz Hernández no sólo ha mostrado ser un funcionario ignorante en temas educativos, sino que carece de esa capacidad intelectiva de diferenciar cosas tan triviales —recordemos su necedad al confundir biblioteca con librería en plena conferencia hace ya más de un año—, es cerrado ante los aportes documentados de sus colaboradores a los que ve con recelo y hasta envidia —me atrevería a jurar—; ahora, el excelentísimo rector, según se sabe, piensa suspender la 6ª Feria Internacional del Libro Chiapas-Centroamérica, lo cual (de darse) sería digno de Ripley y un golpe bajo a la Unach.

Sin embargo ¿qué podríamos esperar de un personaje que fue abortado de la Secretaría de Salud donde dejó instaurado su régimen de aviadores y fue copartícipe de la terrible crisis que vive en la actualidad el sistema? ¿qué puede aportar un funcionario impuesto, vejando la Ley orgánica, por la familia Velasco en la Universidad? ¿qué podemos esperar de quien le ha hecho el fuchi siempre a los eventos culturales, a los que ni asiste y cuando llega desconoce de lo que se está hablando? La respuesta está en la nada.

Pese a que no comulgo con la forma de hacer política del exrector de la Unach, y actual secretario general ejecutivo de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), Jaime Valls Esponda, al menos en su paso por la máxima casa de estudios chiapaneca la Feria del Libro fue funcional. Se hermanaron estados y editoriales. Los escritores brindaron sus participaciones y la afluencia de estudiantes y profesionistas fue alta. Sí, las salas estaban abarrotadas y los invitados siempre salían con un buen sabor de boca.

Desde el 2015, año en que Ruiz Hernández ha estado a cargo, la Feria ha ido cayendo lentamente: muy lentamente. La atención a los escritores no ha sido la misma de otros años y ellos mismos nos lo comentaron, apenados, antes de partir, unos; sorprendidos, por la hecatombe cultural, otros. Ahora se dice que la Feria quedará suspendida, quitada de los planes: porque el rector considera que es un derroche innecesario. Sí, porque el rector prefiere priorizar otras cuestiones y no dar primacía a un evento cultural que sirve para que los estudiantes de las universidades de Chiapas puedan conocer las obras y a sus autores.

Nadie en el círculo del rector ha querido confirmar lo que es un secreto a voces. Ojalá y en esta ocasión al Gobierno de Chiapas se le “prenda el foco” e impida que uno de sus lacios funcionarios haga de las suyas, cosa que siempre pasa. Es inadmisible que una casa de estudios, una universidad que se pondera como la mejor de la entidad, priorice otras cuestiones y sacrifique una Feria Internacional del Libro que lleva cinco años de vida.

Por años, asociaciones civiles, colectivos, grupos independientes y editoriales han sumado esfuerzos para fomentar el hábito en la lectura, para avivar eventos culturales donde los jóvenes de secundaria, preparatoria y universitarios participen y se les contagie ese amor por los libros y las letras.

Ahora, de la noche a la mañana, Ruiz Hernández pretende interrumpir cinco años consecutivos de la Feria a la que debería estársele inyectando más recursos para enriquecerla, para agrandarla y llevarla a otros niveles, en lugar de estar planeando cómo eliminarla y en qué gastarse el dinero que se destinaba para ello. #PorEsoEstamosComoEstamos

 

Manjar

¿Hasta cuando el Gobierno de Chiapas va a aceptar que en Oxchuc —como en varias partes de la geografía— las cosas está de la patada? La diputada Cecilia López, oriunda de ese municipio, señaló ayer que no se ve para donde se dé el desarrollo en esa zona. Los verdes prendieron la mecha y ahora no saben cómo apagar el fuego. #Estamosjodidos // La recomendación de hoy es “Cuatro murmullos y un relincho en los llanos del silencio” (Premio Nacional de Poesía Efraín Huerta 2011) de Balam Rodrigo, un poemario donde las voces de Susana San Juan, Miguel Páramo y el propio Pedro deambulan en la Media Luna que se desgaja en la majestuosa poética del autor. // Recuerde: no compre mascotas, mejor adopte. // Si no tiene nada mejor qué hacer, póngase a leer.

 

@C_T1

 

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