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Bienvenido año nuevo 2020 / Índice

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Ruperto Portela Alvarado.

BIENVENIDO AÑO NUEVO 2020
  SALUD, DICHA FELICIDAD Y ÉXITOS

       “EL que habla sólo, espera hablar con Dios algún día”: Antonio Machado.

Tal vez, seguramente, alguna vez hemos hablado solos para acercarnos en el correr de la vida a Dios. Es nuestro ideal, de hombres de buena voluntad; el gran anhelo. Hemos de pasar de la incertidumbre a la esperanza de tiempos mejores; porque los seres humanos somos la medida de las cosas y la naturaleza.
Vamos andando el camino, no sin sufrir algún tropiezo que nos obliga a levantarnos. También, porque nos evoca la devoción y la fe por el Gran Creador del Universo. El nacimiento del Niño Salvador que es la Navidad, nos llena de entusiasmo como el advenimiento de un año nuevo que nos traerá alegría y muchos éxitos. Son mis mejores deseos para mi esposa, hijos, nietos, amigos, compañeros y demás afectos que me honran.
Por eso, la interpretación de los pesimistas sobre el “fin del mundo”, es algo recurrente que no debe entrar en nuestros corazones. En los años 70s y 80s, esta misma ocurrencia estaba prevista para el año 2000 o inicio del siglo XXI. El mundo no se acaba, no se acabará en millones de años y seguiremos para proveer a nuestros seres queridos, a nuestros hijos de un mundo mejor.
Por eso recurrimos a la figura Celestial Omnipresente y Omnipotente para clamar nuestra ansiedad de amor, para pagar quizá culpas o estar en paz con nosotros mismos; porque seguramente no hemos hecho lo mejor, ni hemos sido lo que la bondad del Creador del Universo nos ha inculcado.
Llenarnos de placer ferviente y sano con la bendición del  Señor y Rey  de las Galaxias, es nuestro deseo, como también para nuestros semejantes. Somos sus hijos, su creación casi perfecta que nos lleva a reflexionar: ¿cuál es nuestra misión en la vida y cuál es nuestro propósito? Nuestra misión es el bien y el propósito  ser feliz haciendo feliz también a los demás.
Hoy –y siempre, seguramente– es tiempo de reflexión, de alcances extraordinarios para desear a todos, familiares, amigos, conocidos y a la humanidad entera, felicidad, amor, salud, bienestar y mucha alegría. Mi deseo infinito porque haya paz y tranquilidad en el mundo, en los hogares y en el corazón de cada uno de nosotros.
Es tiempo del recuerdo y del recuento. Es el momento de hacer el balance de la vida; de nuestros buenos actos y acciones. Rogar por la buena voluntad de los seres humanos en la tierra y el eterno descanso de quienes se nos adelantaron en el sinuoso camino de la vida. Estamos de paso, pero también llevamos el peso de nuestra conciencia, acciones u omisiones.
Hablamos solos para acercarnos a nuestro Dios; a nuestro yo interno y a nuestra gente, aunque nos separe la distancia y el tiempo; porque aunque lejos de muchos de ustedes, están cerca de mí, de mi corazón, de mis pensamientos, por el recuerdo a cada instante de los mejores momentos que nos unen.
Ahora la nostalgia nos invade, pero sabremos mantener la alegría que nos da la vida y la oportunidad de vivir por la gracia de alguien que está presente y atento siempre de cada uno de nosotros: El Señor de la Luz y de la Misericordia.
Que la lejanía no nos separe; por el contrario, nos acerque más con amor, con respeto, con deseos de ser siempre el uno para el otro. Hoy cortamos una hoja más de nuestro calendario, pero habremos de saber que las hojas del calendario no se cortan por los días pasados sino porque cuentan los días transcurridos de felicidad, prosperidad y peripecias en nuestras vidas. Por las experiencias adquiridas.  Por eso no hay que temer a la muerte, pues el día que nacemos empezamos a morir un poco.
Habremos de disfrutar estos días, estas horas del año que está por terminar con el designio de que otro nace. Irremediablemente vendrán otros más en un torrente de tiempo. Gocemos la paz, la tranquilidad, a la familia, los amigos, el gusto y la bienaventuranza de estar viviendo y conviviendo.
Esos son mis deseos; que la paz y la tranquilidad se aloje en sus corazones, en el seno familiar, en el de los amigos y vecinos, para que la luz del Divino Redentor ilumine el camino; que la paz y la tranquilidad este con todos nosotros para siempre.
QUÉ HAYA SIDO UNA FELIZ NAVIDAD DEL 2019, YA  POR TÉRMINAR, Y QUE EL VENTUROSO AÑO NUEVO 2020 QUE IRREMEDIABLEMENTE HABRÁ DE LLEGAR, SEA DE GRANDES ÉXITOS, SALUD, DINERO Y AMOR. SON MIS MEJORES DESEOS PARA TODOS MIS AMIGOS, LECTORES, FAMILIARES Y QUIENES MÁS ALLÁ DE LA AMISTAD, ESTAMOS ENLAZADOS POR ESTOS COMENTARIOS. TODO LO BUENO QUE VENGA DESPUÉS, YA ES GANANCIA QUE NOS MERECEMOS POR HABER NACIDO. SALUD Y SALUDOS. QUE LA LUZ CELESTIAL ILUMINE SUS CAMINOS Y LA BONDAD DEL SEÑOR DE LAS GALAXIAS, INUNDE SUS VIDAS EN INMENSA FELICIDAD… DIOS MEDIANTE.

FELIZ Y PRÓSPERO AÑO 2020.

Sigue el mecate… Y POR ESTE AÑO, ES TODO…
Para comentarios y felicitaciones: rupertoportela@gmail.com
Celular: 961 18 8 99 45.

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